Ki-Adi-Mundi

Ki-Adi-Mundi fue un destacado miembro del Consejo Jedi durante los ultimos años de la República. Con un cerebro binario, su presencia era siempre notada.

fue el único Jedi que pudo tener familia, ya que su especie se estaba extinguiendo y era uno de los últimos machos de ella. Ki-Adi-Mundi era un representante alienígena que se sentaba en el Consejo Jedi.

La familia de Ki-Adi-Mundi, dándose cuenta de que la galaxia necesitaba protectores para salvar a inocentes como los cereanos que estaban bajo la amenaza, permitieron a Ki-Adi-Mundi que fuese llevado a Coruscant para ser entrenado como Jedi.

Ki-Adi-Mundi fue invitado a unirse permanentemente al Consejo Jedi, llenando el espacio vacante que recientemente había dejado el Maestro Micah Giett.

Ki-Adi-Mundi viajó a Naboo para presenciar el funeral de Qui-Gon Jinn. También estuvo presente en la celebración que marcó la liberación de Naboo.

La repentina llegada de la fuerza Jedi, incluido Ki-Adi-Mundi, rescató a los tres cautivos. Ki-Adi-Mundi y varios de los Consejeros Jedi lucharon con los Geonosianos y los androides separatistas. Muchos Jedi murieron ese día, aunque Ki-Adi-Mundi fue uno de los catorce jedi supervivientes.

Durante las Guerras Clon sirvió como General del Gran Ejército de la República fue uno de los cinco Jedi que por primera vez se enfrentaron al General Grievous en el planeta Hypori, luego de que éste diezmase las fuerzas de la República. En tal ocación, fue uno de los pocos en sobrevivir junto a las jedi Aayla Secura y Shaak Ti.

Al tomar efecto la Orden 66, la unidad de Ki-Adi-Mundi, obedeciendo su lealtad natal, asesinó al Caballero Jedi.

Muere trágicamente en el planeta Mygeeto, al ser asesinado por sus propias tropas de soldados clon, una vez activada la Orden 66.

Era paciente y tenia un gran autocontrol.